En medio de la vida se encuentra un sin número de situaciones, murmullos que en el alma se elevan, interpretaciones ondeantes que con rayos iluminan las emociones vividas. Nada es inherente a nosotros, aunque en muchas ocasiones pretendemos verlos de otra forma, somos dimensionales a través del tiempo y el espacio, de la luz y el pensamiento, del cuerpo y de la mente.
Mas sin embargo en ese mecanismo hipnótico de situaciones transformantes, nos aferramos a situaciones, hechos, circunstancias, personas, actividades o emociones llevando al punto de no querer desprendernos, tal vez en algún momento es importante empezar nuevas etapas en nuestras vidas y dejar atrás lo que podríamos decir un ciclo vivido.
Son tantas las motivaciones que llevan al hombre a meditar sobre aquellos acontecimientos que se pudieran presentar, pero es ahí donde se nos olvida que en la vida nada se queda quieto, nada es estático, por ende lo mejor es interiorizar el sentido común de las decisiones que voy a tomar y zarpar a los rumbos que me posibiliten ampliar mejor mi perspectiva. Con esto no quiero decir que siempre que pasamos una hoja o cerramos una página en nuestra vida es porque nos este causando algún dolor, se puede dar pero no siempre es así.
Por ahí dicen que todo llega en su momento correcto, el momento en que deberás aprender lo que necesitas, pero también dicen que todo depende de nosotros; nosotros somos los que tenemos el poder para transformar lo que queremos, en el momento que deseamos. Son muchas las ocasiones que nos encontramos con situaciones de las cuales nos sentimos bien y por ende pensamos que no necesitamos de realizar cambios, mas aun así llegan también circunstancias de las cuales ni tú sabes por qué tan repentinamente esos conceptos se transforman y de buenas a primeras las reacciones no se hacen esperar generando una alteración en esa línea de tiempo en que estamos.
También es importante mencionar que no somos infalibles y cada pieza que movemos es el resultado de ganar o perder y siendo sinceros es el atributo de la vida, un atributo que no está previamente dado ni prefigurado, es una tesis enigmática difícil de comprender
YENNY LORENA RODRIGUEZ
Son tantas las motivaciones que llevan al hombre a meditar sobre aquellos acontecimientos que se pudieran presentar, pero es ahí donde se nos olvida que en la vida nada se queda quieto, nada es estático, por ende lo mejor es interiorizar el sentido común de las decisiones que voy a tomar y zarpar a los rumbos que me posibiliten ampliar mejor mi perspectiva. Con esto no quiero decir que siempre que pasamos una hoja o cerramos una página en nuestra vida es porque nos este causando algún dolor, se puede dar pero no siempre es así.
Por ahí dicen que todo llega en su momento correcto, el momento en que deberás aprender lo que necesitas, pero también dicen que todo depende de nosotros; nosotros somos los que tenemos el poder para transformar lo que queremos, en el momento que deseamos. Son muchas las ocasiones que nos encontramos con situaciones de las cuales nos sentimos bien y por ende pensamos que no necesitamos de realizar cambios, mas aun así llegan también circunstancias de las cuales ni tú sabes por qué tan repentinamente esos conceptos se transforman y de buenas a primeras las reacciones no se hacen esperar generando una alteración en esa línea de tiempo en que estamos.
También es importante mencionar que no somos infalibles y cada pieza que movemos es el resultado de ganar o perder y siendo sinceros es el atributo de la vida, un atributo que no está previamente dado ni prefigurado, es una tesis enigmática difícil de comprender
YENNY LORENA RODRIGUEZ
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