Aun no logro entender, o a decir verdad aun no me logro entender, me mezclo en un desorden donde mis reflejos se deterioran, los actos migratorios entorpecen mi forma de actuar manipulando en mí un lenguaje trivial, intento encontrar alternativas que me guíen a interpretar esas sensaciones no deseadas. Pequeños insectos zumban alrededor, las luces provocan en mi esa irradiación que lastiman mis ojos, prefiero ocultarme en un sitio donde mis lagrimas no se vean, pero mi corazón late tan rápido, aggg de esta forma no podre descifrar el significado de mis pulsaciones, es un impacto que arde, cristales de cuarzo que libran pensamientos desagradables, pero esto fue el aspecto más relevante para trasmutar al exterior los ecos infames que profanan mi vida, solo soy un individuo que va mas allá de lo sabio y bebe de la insania.
Intento regresar a la calma a la quietud, a ese lugar nocturno que despierta mi introspección; el aire noctívago, mi único aliado que aclara mis limites y me permite diferenciar entre el entonces y el ahora, lo real e imaginado, todo lo que soy y lo que creo que soy.
Mi punto está ahí, en cruzar las fronteras de mis límites, en darle voz a la sabiduría de la sombra para no perderme en ese ego profetizador de sentimientos depresivos, me lanzó a ese abismo intrínseco santuario bendito de gemas preciosas y aunque al parecer todo es preciso, pero irreflexivo a la vez, dentro de todo ese proceso electromagnético que separa la delicadeza tibia de un aroma sutil y el halo misterioso de nuestro espacio, el presente se vuelve un cataclismo pues aun estamos en tierras fronterizas, andamos por caminos separados donde la luz de los relámpagos no han abierto la visión de nuestra historia, lo cierto es que en ese pensamiento oculto se revela hechos que algún día saldrán a la luz.
© Yenny Lorena Rodríguez G
Intento regresar a la calma a la quietud, a ese lugar nocturno que despierta mi introspección; el aire noctívago, mi único aliado que aclara mis limites y me permite diferenciar entre el entonces y el ahora, lo real e imaginado, todo lo que soy y lo que creo que soy.
Mi punto está ahí, en cruzar las fronteras de mis límites, en darle voz a la sabiduría de la sombra para no perderme en ese ego profetizador de sentimientos depresivos, me lanzó a ese abismo intrínseco santuario bendito de gemas preciosas y aunque al parecer todo es preciso, pero irreflexivo a la vez, dentro de todo ese proceso electromagnético que separa la delicadeza tibia de un aroma sutil y el halo misterioso de nuestro espacio, el presente se vuelve un cataclismo pues aun estamos en tierras fronterizas, andamos por caminos separados donde la luz de los relámpagos no han abierto la visión de nuestra historia, lo cierto es que en ese pensamiento oculto se revela hechos que algún día saldrán a la luz.
© Yenny Lorena Rodríguez G
No hay comentarios:
Publicar un comentario