Una de las recomendaciones de nuestra guía fue probar el tradicional helado de la ciudad que por generaciones ha deleitado a miles de barranquilleros.
Y así fue, llegamos a la Heladería Americana, nos dirigimos a la caja a solicitar nuestro pedido, sin pensarlo preguntamos por el famoso Frozo Malt.
Esperamos unos segundos y ya teníamos al frente de nosotros el Helado, acompañado con una galleta azucarada y una cubierta de jalea de frutos tropicales, todas las expectativas puestas, de inmediato la primera cucharada, uumm esa textura de una malteada y la composición de un helado artesanal con el suave sabor a chocolate generan puro placer en mi paladar, no ahí duda que tienen una receta única.
Bueno y para acabar de cautivarlos, solo me queda por comentarles que uno de los sitios preferidos de ‘Gabo’ era está heladería, tanto así que en unas de las escenas de su libro el amor en los tiempos del cólera, la evoca. "La llevó a la Heladería Americana, desbordada a esa hora por los padres que comían helados con sus niños bajo los ventiladores de grandes aspas, colgados del cielo raso... Florentino Ariza tomó un café negro, mirando a la niña sin hablar, mientras ella se comía el helado con una cuchara de mango muy largo para alcanzar el fondo de la copa”
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