viernes, 17 de junio de 2011

LA AGONIA DE UNA FLOR. Fernando Soto Aparicio



Los géneros se desdibujan, transformando su síntesis en un mundo que en muchas ocasiones huimos pero que a decir verdad esta más cerca a esos puntos múltiples que se adhieren en circunstancias que se viven a menudo, tal vez muchos difieran porque comienzo con estas palabras tan asiduas, tal vez porque mi motivación en la lectura no se acrecienta en temáticas que escudriñan tan afondo la interpretación de este país.

Sin embargo la adaptación a este tipo de novela toma en mi un foco que de alguna manera deslumbra mi primera impresión con la portada de este libro, desde el momento que mi compañera Ángela Lizeth Rodríguez me muestra este libro con la alternativa de explorar su más intimas letras, veo en el un rojo intenso impregnado que se matiza en una rosa radiante y un capullo (del cual puedo mencionar en este momento nunca abrirá sus pétalos) que son tomada por una mano que inspira inocencia. Es una portada que simboliza amor, belleza, esperanza pero que se desvanece bajo el silencio sórdido de un sufrimiento que es provocado por un mundo mísero.

Fernando Soto Aparicio, nos da la posibilidad de conocer con mas apropiación una vereda “VILLATRISTE”, lugar donde se conjugan sentimientos y en donde habita Liria, una joven de quince años quien por circunstancias absurdas del destino, o mejor antisocialistas de la vida queda mutilada al caer en un artefacto explosivo, es un estallido mortal para su vida pues todas esas ilusiones de una joven que tiene tantas proyecciones decae de forma repentina. Es una de las escenas donde Soto Aparicio plasma de una forma tan minuciosa hechos tan fatídicos de nuestra cotidianidad como han sido las minas antipersonas o quiebrapatas, detalles que no solo quedan con el despliegue sórdido de un estallido, sino también del sometimiento que trae consigo el calvario que tienen acuesta por el resto de sus vidas.

Así de esta forma presenta a sus demás personajes como a la monja Margarita, quien después de ser violada por un grupo paramilitar queda embarazada, o a Martin; medico quien está en contra de los malos manejos del presupuesto que se asignan y no puedo dejar a un lado los crímenes que se ilustran en las escenas de esta novela, personajes que sin piedad ni corazón interponen el destino de hombres y mujeres con ganas de ver el mundo con otra cara.

Ya para terminar comparto tres fragmentos de este libro para que los analicen, me llamaron mucho la atención. El primero es el equivalente a la perdida de esperanza, en donde la coexistencia ya no hace parte de nuestra vida, generando así inestabilidad, dice así:

“…Dios me falló, o tal vez peor que eso, me convierto en uno de los payasos de su circo, y me asigno el más grotesco de los papeles. Yo lleve a Dios en mí, conmigo, era mi compañero y mi morada, mi guía y mi brújula, pero él se fue y me dejo ese monstruo para que se burlara de mi terror y de mi vergüenza. Y no puedo decir que Dios existe, sino que es cruel, perverso, y que su sadismo se ha cebado siempre en los seres humanos que somos indefensos. El si de veras es Legión, y cada una de sus víctimas esta sola…”.

El segundo es la contraposición del primer fragmento:

“…Dios es tal vez el crecimiento de una fruta, es el aire que nos rodea, es el canto de un pájaro que inaugura con júbilo la madrugada, es el humo de un fogón que calienta la amistad y convoca a la paz y a la armonía, es el pan que amasamos, el agua que bebemos, el aire que sostiene los caminos por donde andan despacio las estrellas, la mirada de un niño, el beso del amor apretado en la ciruela tibia de unos labios, los cascabeles frescos de la risa, el crecimiento lento de los arboles, el resplandor azul de los relámpagos, la lluvia que se abraza con la tierra para que sean posibles las cosechas….”

Y la tercera es el proceso final que sacude la vida.

“…Voy a cruzar el quicio de esta puerta de la vida, le digo, o lo pienso. Nadie ha podido saber jamás que es lo que sigue. He terminado por no esperar un cielo ni un infierno, y tal vez mas allá del túnel al que la puerta se abre haya solo una sombra interminable y un silencio absoluto…”

Se me olvidaba mencionar que es un libro de la Editorial La Serpiente Emplumada y consta de 160 hojas.

Yenny Lorena Rodriguez G

2 comentarios:

ANGELA RODRIGUEZ dijo...

UMMMM SIN PALABRAS PARA EXPRESAR ...PERO SOLO PUEDO COMENTAR QUE TIENES EN TI EL NOBLE PERO APASIONANTE DON DE LA POESIA O LO QUE YO LLAMARIA TU SEGUNDA ALMA, DEJANDO REFLEJAR A PLENITUD CADA LETRA CADA PALABRA QUE NOS ENTREGAS Y NUEVAMENTE UMMMM FELICITACIONES

Yenny Lorena Rodriguez G dijo...

Angela muchas gracias por darte un recorrido por este sitio que lo que pretende es plasmar como tu misma lo mencionas mi "segunda alma", no hay mejor medio de expresión que las letras que se extienden a traves de la escritura y que mejor por medio de la poesia.