Imágenes que hablan por sí solas, pensamientos retrógrados que se mezclan con el barro, fuerzas encarnadas por dioses; es ese antagonismo, esos combates fabulosos, que solo provocan ansiedad.
Empiezo a concluir, que estoy iniciando una etapa de fatalismo avasallante, que incorpora una clase de construcción mental, que solo me está conduciendo al dolor y/o escepticismo.
Qué tal si mejor, me disuelvo en un no ser, no pensar, no sentir, mejor realzo una nota acústica que consterne mi encendida desesperanza.
Todo queda en el aire, sin respuesta, avatares que bombardean mi corazón, nada se puede esperar con seguridad, o si, tal vez aguardar que el dios se hastía de mis opulencias y acabe de oscurecer el tono de mis matices.
Lo cierto, es que aun no ocurre, por lo que prefiero secar mi cara y continuar en mi plano ethero , de irracionalidades inevitables.
© Yenny Lorena Rodríguez G
© Yenny Lorena Rodríguez G
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