Una nueva aventura nos esperaba, rumbo a la cascada más alta de Colombia, nuestra ruta llegar a Choachí departamento de Cundinamarca, en la cordillera oriental, ubicada a unos 50 Kilómetros al sur de Bogotá, la capital de Colombia.
Para llegar a la cascada, tomamos la vía que conduce de Bogotá a Choachí, una carretera con bastantes curvas, que por poco me pasa factura, lo bueno es que hicimos una parada estratégica, tome aire, realice estiramiento, me tome un caldo de costilla y renovada, es importante que tengan precaución con los ciclistas.
La cascada La Chorrera se encuentra dentro del Parque Natural Chorrera, una reserva natural que cuenta con una gran diversidad de flora y fauna. El parque cuenta con senderos bien señalizados que permiten llegar a la base de la cascada, donde se puede disfrutar de una vista impresionante.
Es importante hacer un
precalentamiento, la caminata puede
durar aproximadamente cuatro horas ida y regreso, el recorrido consta de 7
paradas, (parqueadero- taquilla- cascada chiflón- estación natural- el árbol de
los deseos. Cueva de los monos y la chorrera).
Este lugar, nos comenta
nuestro guía es un sitio que se ha conservado para preservar el medio ambiente,
se conformó una asociación comunitaria de 17 familias con el fin de cuidarlo y
generar empleo a las personas de la
región.
Choachi, significa puerta del sol, ventana de la luna, su
gentilicio es Chiguanos, un lugar sagrado para nuestros muiscas; Según la mitología la cascada La Chorrera era
el hogar de una diosa llamada Chía, quien era la protectora de la naturaleza y
de los seres vivos. Los muiscas creían que Chía habitaba en las aguas de la
cascada y que era responsable de la fertilidad de la tierra y de las cosechas.
Caminar por esos senderos es rememorar los pasos de nuestros
antepasados, es enaltecer los caminos reales de los muiscas, senderos que conectaban los
diferentes territorios, estos caminos eran una parte integral de la economía y
la sociedad muisca, ya que permitían el comercio y el intercambio de bienes y
conocimientos entre las diferentes comunidades.
Los caminos reales también estaban dotados de estaciones de descanso,
conocidas como "tambo", se dice que cuando llegaban a su destino, se
lavaban los pies, se cambiaban sus alpargatas y se dirigían a la iglesia.
Sin dudarlo es un lugar hermoso y tranquilo, perfecto para conectarse con la naturaleza y disfrutar de un día al aire libre, durante el trayecto vas a pasar por una cascada mas pequeña de 40 metros, El Chiflon. En esta zona se encuentra el puente de fotografía, el Charco Natural, la Gruta del Señor de Los Milagros y si deseas puedes practicar rappel y torrentismo.
Una Parada ineludible del recorrido, es el árbol Guamillo, bautizado como el árbol mas antiguo del bosque, 150 años de existencia. Los muiscas tenían la tradición de buscar el árbol mas antiguo, inclinaban la cabeza para soltar las malas energías, y ponían el pecho para recibir las buenas energías; tener esta conexión es maravilloso sientes un frio que recorre tu cuerpo pero lleno de vitalidad.
Ya por ultimo llegamos a un lugar que le denominan la cueva de los monos un sendero empinado, una formación rocosa si miras en la parte superior vas a observar como estas piedras calizas tienen una aspecto sobresaliente denominadas estalactitas.
«No hay mejor lugar para encontrarse
a sí mismo que sentarse junto a una cascada
y escuchar su música».
– Roland R Kemler
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